Gillette se renueva, pero muy poco

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Gillette acaba de lanzar una nueva maquinilla de afeitar, la Gillette Fusion Proglide. Para ello han creado expectación durante días mediante campañas en TV y en prensa, avisando que se acercaba una nueva revolución en el afeitado.

Y aún estamos esperando esa revolución. Hace 4 años sacaron la Gillette Fusion, que si suponía un cambio bastante sustancial con respecto a la Mach3, y al resto de maquinillas del mercado. Pero lo que acaban de sacar es simplemente una copia mejorada de la Fusion, poca cosa para la empresa líder y a la vanguardia del sector.

Ese el el problema de crear expectación. Si después el producto no está a la altura, creas decepción en los clientes, cosa que puede aprovechar Wilkinson, por ejemplo, para atraer clientes ofreciendo una verdadera innovación tecnológica.

Y es verdad que aún no probé la nueva maquinilla, y puede ser todo lo buena que quiera, pero para una novedad que sacan cada 3 ó 4 años, bien pueden sorprender con un nuevo producto, no una mejora de un producto antiguo. Se ve que le van bien las cosas a Gillette, que se permite dormirse en los laureles...